Cada vez se habla más de criptomonedas.
A diario vemos noticias en los medios de comunicación: picos de precio históricos para Bitcoin en 2021, caídas y recuperaciones, correcciones lógicas del mercado, nuevas aplicaciones de la tecnología blockchain…
Nos topamos con publicaciones en redes sociales: opiniones (tanto a favor como en contra), promesas de enriquecimiento rápido (señal de alarma) o incluso recomendaciones de inversión (con el riesgo que conlleva seguirlas a ciegas).
A estas alturas, cualquier persona habla de Bitcoin, a la hora del café en la oficina, en trayecto del bus, hasta en las comidas familiares…
Las criptomonedas están cada vez más presentes en el día a día
Las empresas dedican cada año más recursos para aprovechar las posibilidades de la tecnología blockchain (un valor que va más allá del precio de cotización).
Y los pagos con criptomonedas ya son una realidad.
Continuamente, aparecen nuevas criptomonedas en el mercado. Algunas duran poco mientras otras ganan terreno.
Ya se superan las 10.000 criptodivisas y la capitalización aumenta año tras año.
Los gobiernos y las instituciones siguen queriendo instaurar el miedo al tiempo que se suben al carro del dinero digital.